Como ves, era muy monotema
El otro día subí al desván a buscar la vieja caña de pescar de mi padre cuando me pareció ver un destello dorado cerca de uno de los cajones de una anticuada cómoda. Receloso, me acerqué al mueble con cuidado y, con la prudencia de quien se enfrenta a lo desconocido, abrí el cajón para encontrarme (pude comprobar en cuanto mis pupilas se acostumbraron a aquella luz cegadora que provenía de su interior) con mi viejo cuaderno de acuarelas.
No sin cierta sorpresa., rápidamente observé que estaba hecho mierda. O sea, que era de hoja caduca.
El cuaderno tiene cuatro o cinco dibujos que fechan del 2008. Además de los primeros trazos con el pincel que enseñé por tuiter, había alguno más o menos aceptable... No era lo mío pero ¿y lo bien que me lo pasé descubriéndolo?¡qué risas!
Y quien sabe, igual algún día vuelvo a intentarlo. Dicen que la práctica hace al maestro, y aunque de maestro no tengo nada se me da genial eso de practicar.
